Manos Unidas nos reta a “compartir” para plantarle cara al hambre

Manos unidas ha presentado su campaña contra el hambre “comparte lo que importa” a través de varios eventos en Valladolid que concluirán el domingo día 11, con la celebración de Jornada Nacional de la institución, con una colecta única y específica en todas las parroquias. Con esta campaña, la organización concluye su trienio de lucha contra el hambre (2016-2018) en el que se está trabajando en dar respuesta a las causas y problemas que provocan el hambre en el mundo: Acompañando a los más pobres, reforzando el derecho a la alimentación de los pequeños productores, contribuyendo al cambio hacia unos sistemas alimentarios más justos y educando para una vida solidaria y sostenible.

Para presentar la campaña en Valladolid y poder exhibir no solo cifras sino ejemplos concretos de ese “compartir”, Manos Unidas ha contado con la presencia de  Pilar Basagoiti Noriega, religiosa de la Asunción que ha pasado sus últimos 40 años en Africa del , sobre todo en Burkina Faso y en Costa de Marfil, con algunos altos en Níger y Togo, y que ha compartido su experiencia en colegios y parroquias (al igual que otros 30 misioneros y expertos en desarrollo han hecho en otras 53 ciudades españolas).

El lunes, día 5, de febrero, la misionera ofreció su testimonio en San Vicente de Paúl, y el martes, 6 de febrero, lo hizo ante los medios de comunicación provinciales en el Arzobispado, acompañada por don Luis Argüello, obispo auxiliar; José María Borge, presidente de Manos Unidas y José María Gil, consiliario de la entidad. Ese mismo día, por la tarde, la misionera repitió la experiencia en la parroquia de El Salvador donde, a continuación, don Luis Argüello presidió la Eucaristía central de la campaña. “Consideramos un deber moral, plantar cara al hambre. Y para ello, desde Manos Unidas nos hacen una propuesta: compartir lo que importa, que es más allá del dinero, siempre necesario y que nosotros trataremos de recaudar para colaborar. No hay que olvidar que también es importante compartir la persona, el tiempo o la lucha por la justicia”, apostilló el prelado.

El viernes, día 9, como gesto de apoyo a los millones de personas que sufren el hambre en el mundo, Manos Unidas celebrará el Día del Ayuno Voluntario con eventos en toda la provincia que persiguen destinar el importe de las comidas de ese día a los cerca de 1.500 proyectos de desarrollo que realiza la organización en 58 países de todo el mundo. Varios centros educativos, por ejemplo, de sumaron a esta propuesta y, entre ellos,  el colegio Amor de Dios, que recaudó fondos para la misión de Kamerún (África) para facilitar material y bagaje sanitario y poder atender a niños y adultos con muchas necesidades que son atendidas por las Hijas de la Caridad. A las 18:00 se celebrará una vigilia en la capilla del centro.

En este 2018 el trabajo de la institución se centrará en tres cuestiones esenciales y urgentes: favorecer iniciativas que permitan el acceso a los alimentos para consumo humano, y no para el beneficio económico; impulsar sistemas de producción medioambientalmente sostenibles y plantear propuestas que eviten la pérdida y el desperdicio de alimentos. Para ello, la organización, que tan solo en Valladolid recaudó el año pasado 726.000 euros, financiará proyectos como los seis concedidos a nuestra delegación provincial (en India, Camerún, Kenia y Brasil) por un importe de 421.159 euros. “El  de la campaña es un cartel muy moderno y actual en el que se ve reflejado la transformación de un móvil en una regadera en alusión a las redes sociales donde se comparten muchas cosas pero en la mayoría de las ocasiones no tienen fondo alguno.  Por ello, desde Manos Unidas se quiere hacer un llamamiento con esta imagen para que los ciudadanos sean conscientes de que lo que se comparte en las redes puede ayudar a aquellas zonas en las que Manos Unidas desarrolla sus proyectos”, explicó Borge.

La misionera Pilar Basagoiti, por su parte, definió como “fundamental mirar, ver y escuchar para poder comprender al otro. Las personas que padecen necesidades, tienen la esperanza en el corazón, esa esperanza humana que tiene todo hombre de poder un día ser más, tener un poco más, vivir algo mejor. En aquellas zonas un simple molino  o un pozo en un pueblo ayuda a quitar el hambre y a que la gente tenga más dignidad”

Manos Unidas lanza “comparte lo que importa” reclamando a la opinión pública que “comparta”, también en redes sociales, la realidad en la que viven cientos de miles de millones de personas en un mundo en el que, en el último año, se ha incrementado en un 11% el número de personas hambrientas y pide a la sociedad que se sume a la lucha contra el hambre, la pobreza y contra las estructuras injustas que perpetúan esta situación (#ComparteLoQueImporta). Las cifras que más importan a Manos Unidas, tanto en esta campaña como en las 57 anteriores, son las del hambre, ya que 815 millones de personas continúan pasando hambre en el mundo, la desnutrición cónica infantil afecta a 155 millones de niños menores de 5 años y 15,3 millones de personas fueron desplazadas debido a las crisis alimentarias que desencadenaron los conflict