Cofradía Nuestra Señora de las Angustias

Las Angustias emociona a Valladolid en la primera etapa de su misión evangelizadora hasta el Monasterio de Santa Clara

18 de septiembre de 2025


Había una discreta expectación a la salida desde su Iglesia Penitencial, pero a medida que Nuestra Señora de las Angustias, la Virgen, la Madre, a la que muchos dicen “Señora de Valladolid”, fue avanzando por algunas de las calles más céntricas de Valladolid fue atrayendo también a más y más fieles, a más y más curiosos al recorrido de esta primera etapa de su misión evangelizadora con motivo del Año Santo, ‘Peregrinos de Esperanza’, que está celebrando el conjunto de la Iglesia Católica.

Desde que la talla de Juan de Juni abandonó su templo, al que no regresará hasta dentro de 10 días, cuatro traslados y una Procesión Triunfal, quedó patente que la misión evangelizadora emprendida este miércoles, 17 de septiembre, por la Ilustre Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de las Angustias, una de las decanas de la ciudad, es una llamada a la comunión misionera. Con otras cofradías y hermandades de Valladolid, que se integraron ya desde este primer traslado hasta el Monasterio de Santa Clara en el cortejo procesional, portando también sobre sus hombros a la Virgen, que estrenaba parihuelas de madera adornadas con faldones de terciopelo azul; con el Presbiterio diocesano, con comunidades parroquiales y religiosas —tanto femeninas como masculinas— y con el conjunto de la ciudadanía vallisoletana. Pero, muy especialmente, con aquellas personas y colectivos con los que el Papa Francisco, en su Bula de Convocación del Año Santo, pidió ser signo “concreto” de “cercanía y esperanza”. Es el caso de los ancianos y los enfermos.

Entrañables momentos con los ancianos

Precisamente, con los ancianos y los enfermos se vivieron dos de los momentos más entrañables de esta primera etapa de la misión evangelizadora de Las Angustias.

El primero, cuando al llegar a las puertas del Hogar Sacerdotal, varios presbíteros, junto a sus hermanas de las Discípulas de Jesús y el resto de trabajadores, aguardaban sentados en una fila de sillas dispuestas para la ocasión en la calle la llegada de la Virgen. Entonces, Antonio Martín, sacerdote ya jubilado, a punto de cumplir los 85 años se echó al hombro su vieja guitarra para cantarle a la Virgen. Tras un momento de oración compartida y el rezo de la Salve, Martín volvería a dirigir con su guitarra al coro, al que se unieron, esta vez sí, las voces del resto de fieles y cofrades, para cantar mientras se alejaba ya la imagen: “Ven con nosotros al caminar. Santa María, ven”.

La Virgen continuó su recorrido, haciendo parada en el Monasterio de las Concepcionistas Franciscanas, las parroquias de San Miguel y San Nicolás de Bari, la Iglesia de San Quirce y Santa Julita, el Palacio Real, la Iglesia Conventual de San Pablo, la recién estrenada Plaza Padre Gago y, así, hasta llegar a la Residencia del Sagrado Corazón de Jesús. Y allí, de nuevo, aguardaban decenas de residentes —todas mujeres—, junto a las Religiosas Angélicas, que regentan la Residencia, y trabajadores del centro. En sus caras se dibujaban la alegría, la emoción y la esperanza al tener tan cerca a la Virgen de Las Angustias, cuya cofradía titular les había visitado ya un día antes para compartir su tiempo y un concierto.

La emoción contenida, finalmente, estalló en aplausos. Y no sería la última vez, porque también al llegar a su primer destino, el Monasterio de Santa Clara, que habitan las Clarisas, de nuevo fue recibida con aplausos en un templo completamente lleno y en el que podrá venerarse la imagen, según ha informado la Cofradía, hasta el próximo sábado, día 20.

Próximos traslados

Después de su periplo por el centro de Valladolid y los barrios de San Nicolás y la Rondilla hasta el Monasterio de Santa Clara, donde se celebrarán distintos actos de oración y formación con jóvenes, centros educativos y comunidades de vida contemplativa, Nuestra Señora de las Angustias será trasladada, el día 20, hasta el Convento de las Hermanas de la Cruz, en el barrio de Las Delicias, donde la Cofradía extenderá su acción social a personas y familias vulnerables y personas sin hogar. Desde allí, continuará su misión evangelizadora hasta la Basílica-Santuario Nacional de la Gran Promesa, el día 24.

Finalmente, y tras una vigilia nocturna en la Basílica-Santuario que se extenderá durante nueve horas del 25 al 26 de septiembre, se celebrará el último de los traslados hasta la Santa Iglesia Metropolitana Catedral, donde ya el sábado 27 el Arzobispo de Valladolid, don Luis Argüello, presidirá a las 18:00 horas la Eucaristía Jubilar. Finalizada la Eucaristía en la Catedral, la misión evangelizadora culminará con la Procesión Gloriosa de regreso de la Virgen de Las Angustias a su sede penitencial.