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Crónica

Elección de Administrador Diocesano

22 de junio de 2009


Publicado: BOA 2009, 198.


  • Elección y reseña biográfica
  • Primer saludo a los fieles

    Elección y reseña biográfica

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    Tras la toma de posesión de D. Braulio Rodríguez Plaza como nuevo arzobispo de Toledo y habiendo quedado vacante nuestra Archidiócesis de Valladolid, el día 22-6-2009 el Colegio de Consultores se reunió para elegir al Administrador Diocesano, figura prevista en el Código de Derecho Canónico con la misión de «regir temporalmente la diócesis» con «los deberes y la potestad del obispo diocesano, con exclusión de todo aquello que por su misma naturaleza o por el derecho mismo esté exceptuado» (cc. 421 y 427) , labor que debe desempeñar hasta la toma de posesión de un nuevo Arzobispo. Resultó elegido para este cargo el presbítero diocesano D. Félix López Zarzuelo, que hasta ese momento había ejercido la responsabilidad de Vicario General de la Archidiócesis.

    D. Félix nació en Tordesillas (Valladolid) el 25-2-1935. Hizo los estudios de Latín, Humanidades y Filosofía en el Seminario Diocesano de Valladolid (1947-1954) y de Teología en la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, en la que obtuvo la licenciatura en 1959. Fue ordenado sacerdote el 28-3-1959 en la Catedral Vieja de Salamanca.

    En 1969 se licenció en Derecho Canónico en la Universidad Pontificia de Salamanca, y en 1980 obtuvo el Doctorado en Derecho Civil en la Universidad de Valladolid. Es autor de numerosas publicaciones y artículos sobre derecho matrimonial y procesal canónico en libros y revistas de Derecho Canónico, como: El Proceso de Matrimonio rato y no consumado, Valladolid 1991; y Práctica procesal canónica de la causas matrimoniales de nulidad de matrimonio, Madrid 2002.

    Ha desempeñado los siguientes cargos:

  • Ecónomo de las parroquias de Gallegos de Hornija, San Salvador y Marzales (1959-62).
  • Coadjutor de la parroquia San Pedro Apóstol de Valladolid (1962-68).
  • Notario Mayor del Arzobispado y Teniente Fiscal del Tribunal Eclesiástico de Valladolid (1970-75).
  • Profesor de Derecho Público Eclesiástico en el Estudio Teológico Agustiniano de Valladolid (1970-83).
  • Vicario Judicial del Arzobispado de Valladolid (1975-2003).
  • Canónigo de la Catedral de Valladolid (desde 1976); y Canónigo Doctoral (desde 1994).
  • Profesor Titular de Derecho Eclesiástico del Estado en la Facultad de Derecho de Valladolid (1984-2003).
  • Vicario General del Arzobispado de Valladolid (2003-09), designado por el anterior arzobispo D. Braulio Rodríguez Plaza.
  • Es Académico de Número de la Real Academia de Legislación y Jurisprudencia de Valladolid (desde 2000); su discurso de ingreso versó sobre Anorexia, bulimia y ludopatía, nuevas causas de nulidad de matrimonio. Actualmente también es Profesor de la Escuela de Práctica Jurídica de la Universidad de Valladolid.

    Primer saludo a los fieles

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    Queridos hermanos y hermanas:

    Gracia y Paz a todos mis hermanos de la Archidiócesis de Valladolid.

    Os comunico que el Colegio de Consultores, supremo organismo de gobierno de la Archidiócesis en sede vacante, me ha elegido Administrador Diocesano, por la promoción del que fuera nuestro Arzobispo, D. Braulio Rodríguez Plaza, a la Sede arzobispal de Toledo.

    Abrumado por esta importante y grata encomienda que me hace el Señor a mi humilde persona, a través de mis hermanos del Colegio de Consultores, os ruego que todos juntos, a la vez que agradecemos el ministerio pastoral del que fue nuestro querido arzobispo, D. Braulio, pidamos al Señor para que Su Santidad el Papa designe, cuanto antes, un nuevo Padre y Pastor para esta nuestra Iglesia particular, que peregrina en Valladolid, en comunión con la Iglesia Universal.

    El Administrador Diocesano es un sacerdote que adquiere su potestad por el hecho de haber aceptado su elección, y no se requiere confirmación de nadie, aunque ha de comunicarse su elección inmediatamente a la Santa Sede. Goza de la potestad del obispo diocesano, con exclusión de todo aquello que por su misma naturaleza o por el Derecho mismo esté exceptuado.

    El Código de Derecho Canónico prohíbe a quien se hace cargo interinamente de la Diócesis cualquier acto que pueda causar perjuicio a la Diócesis o a los derechos episcopales, y concretamente se prohíbe, personalmente o por medio de otros, destruir o alterar algún documento de la curia diocesana.

    Por ello, y en virtud del Juramento que acabo de hacer, cuidaré con esmero junto con mis hermanos del Colegio de Consultores y con el siempre ponderado consejo de D. José, nuestro Arzobispo emérito, de las personas, del patrimonio artístico y cultural y de los documentos de los archivos de nuestra Iglesia particular de Valladolid.

    Os pido a todos, sacerdotes, religiosos y laicos, que hasta la designación del nuevo arzobispo sigamos el Plan Pastoral Diocesano 2008-2012 aprobado por el que fuera nuestro arzobispo D. Braulio Rodríguez Plaza: “La Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros (Jn 1,14). Conoce, celebra y vive la Palabra de Dios” .

    Nuestra Archidiócesis ha quedado vacante en unos momentos de fuerte crisis económica, que ha llevado al paro a más de cuatro millones de hermanos nuestros. Nosotros no podemos olvidar nunca, pero sobre todo hoy, lo que Cristo nos ha dicho en san Mateo: «En verdad os digo que cuanto hicisteis a unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis».

    A la Virgen de San Lorenzo y a san Pedro Regalado encomendamos esta nuestra Iglesia particular, que peregrina en Valladolid.

    Vuestro hermano y servidor:

    Félix López Zarzuelo, Administrador Diocesano