Modificar
Domingo, 29 de junio de 2003
Ciudad del Vaticano
Este acto se repite anualmente en la festividad de San Pedro y San Pablo, siendo cada vez impuestos los palios a todos los arzobispos nombrados durante el año anterior; en esta ocasión, junto a D. Braulio reciben el palio otros dos arzobispos españoles.
El palio es una tira de tela blanca, realizada con la lana de corderos bendecidos por el Papa, con seis cruces; se coloca colgando del cuello sobre los hombros, a modo de collar o bufanda, con dos puntas que caen una por delante y otra por detrás. En el imperio romano era un distintivo para aquellos a los que el emperador quería honrar, y luego pasó a honrar al Papa y a los obispos a quien el Papa se lo concedía. Hoy se impone a los arzobispos como "signo de la autoridad metropolitana y símbolo de unidad y estímulo de fortaleza" (Ceremonial de los Obispos, 1154), y lo llevan en las celebraciones más solemnes. En el Oriente hay una insignia análoga, el "omophorion", más adornado, pero que llevan todos los obispos. Además, desde hace siglos existe la costumbre de enviar el palio desde Roma a los patriarcas y metropolitas orientales católicos.
Este acto se repite anualmente en la festividad de San Pedro y San Pablo, siendo cada vez impuestos los palios a todos los arzobispos nombrados durante el año anterior; en esta ocasión, junto a D. Braulio reciben el palio otros dos arzobispos españoles.
El palio es una tira de tela blanca, realizada con la lana de corderos bendecidos por el Papa, con seis cruces; se coloca colgando del cuello sobre los hombros, a modo de collar o bufanda, con dos puntas que caen una por delante y otra por detrás. En el imperio romano era un distintivo para aquellos a los que el emperador quería honrar, y luego pasó a honrar al Papa y a los obispos a quien el Papa se lo concedía. Hoy se impone a los arzobispos como "signo de la autoridad metropolitana y símbolo de unidad y estímulo de fortaleza" (Ceremonial de los Obispos, 1154), y lo llevan en las celebraciones más solemnes. En el Oriente hay una insignia análoga, el "omophorion", más adornado, pero que llevan todos los obispos. Además, desde hace siglos existe la costumbre de enviar el palio desde Roma a los patriarcas y metropolitas orientales católicos.
Más información