Publicado: BOA 2004, 0.
Al mismo tiempo que los habitantes de las 25 naciones de la Unión Europea iban a las votaciones para la elección de miembros del Parlamento Europeo, los Secretarios Generales de las Conferencias Episcopales de Europa (CCEE) celebraban un encuentro en Belgrado del 10 al 13 de junio.
La propuesta del Evangelio en Europa
Hay signos de que ahora es la época de un nuevo descubrimiento y de la propuesta del Evangelio para nuestro continente: el debate sobre las raíces cristianas de Europa, la confusión y el miedo de cara al terrorismo, la percepción de la lacra del fundamentalismo, la nueva búsqueda de significado y la espiritualidad, la ampliación de experiencias religiosas ambiguas, irracionales, sectarias, alternativas...
Los Secretarios Generales constataron esta idea en sus actividades recientes, que expresan simbólicamente esta nueva oportunidad para el cristianismo:
La peregrinación a Santiago de Compostela de las delegaciones de los 25 Estados miembros de la Unión Europea, organizados por la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Comunidad Europea (COMECE), del 17 al 21 abril; la reunión ecuménica en Stuttgart, el 8 de mayo con 150 católicos, protestantes y ortodoxos, comunidades y movimientos, con alojamiento en otras tantas ciudades; la peregrinación de numerosas personas al santuario de Mariazell, en Austria, del 21 al 22 mayo, que implicó a ocho países de la Europa central y del este, como culminación de dos años de reuniones locales; la visita reciente y sorpresiva del papa Juan Pablo II a Suiza, los días 5 y 6 mayo. ¡Hay gente cristiana en Europa más allá de cada frontera y Europa puede estar orgullosa de esto! El cambio económico y político de la Europa del Este señala una nueva gran tarea: el intercambio entre las tradiciones y la historia para superar de una vez por todas el esquema del “ Este” y del “ Oeste” de Europa.
La necesidad de cara a la cultura moderna y a los fenómenos de secularización y del laicismo es urgente. En el Oeste hay ya una experiencia larga de esta cuestión, aunque en parte ha fallado; para el Este, este tema es nuevo, es una pregunta emergente. Uno de los Secretarios Generales del Oeste preguntó si ciertamente hay países en los que a la Iglesia no le ha llegado parte de ese secularismo.
La nueva Europa
Para los Secretarios Generales del Este de Europa las preguntas cruciales son: bajo el comunismo los cristianos fueron marginados y humillados ¿estarán también así en la Unión Europea? ¿La fe será excluida para seguir siendo una cuestión privada en la nueva Europa? Los padres fundadores de la idea de Europa eran cristianos, pero ¿qué está sucediendo ahora? Un intercambio verdadero de dones es posible: el Oeste puede ofrecer al Este su propia experiencia de cómo vivir como cristianos en una sociedad secularizada y el Este puede ayudar al oeste a recuperar sus valores perdidos.
Los participantes también constataron la relación entre la Iglesia y las instituciones europeas, con especial referencia al Tratado Constitucional y a las cuestiones éticas. El secretario de la COMECE, Mons. Noël Treanor, ofreció una experiencia positiva del diálogo y de la colaboración entre el mundo eclesiástico y político en Bruselas y en varios países.
Los prejuicios que las instituciones tienen contra la iglesia deben ser superados. Un ejemplo particularmente significativo es el artículo 51 del Borrador del Tratado Constitucional que garantiza elementos básicos tales como libertad religiosa para las Iglesias y las comunidades y el reconocimiento de su papel y su contribución específica. El párrafo del mismo que se abre al diálogo transparente y regular entre las instituciones y las Iglesias es particularmente prometedor. Se ha visto como urgente que la Iglesia necesita echar mano de gente de diversos países que sean expertos en materias jurídicas y éticas y crear una red entre ellos.
cristianismo y laicismo
El tema de la relación entre el cristianismo, el laicismo y las religiones causó un vivo debate. Una cosa es hablar de una visión secular que rechace el papel de la religión, pero otra cosa es hablar de la secularización como expresión de la relación entre la Iglesia y el Estado; Ésta última es la una visión más auténtica. Había una presentación de la experiencia simbólica en Francia, donde existe una clara separación entre la Iglesia y el Estado, lo que no significa indiferencia entre los dos. De todos modos, la legislación sobre el uso del velo en las escuelas ha mostrado los límites y la debilidad de este modelo laicista.
También surgió la pregunta sobre porqué, en algunas naciones con una mayoría católica, nos encontramos con gobiernos o sistemas indirectos que parecen perjudicar particularmente a la Iglesia. En una sociedad laicista o laica la Iglesia debe ser capaz de escuchar las preguntas que existen y encontrar un lenguaje con el en la cual contestar y, sobre todo, ser testigos y proclamar el Evangelio que es la “ buena noticia” para todos y cada uno.
La reunión de Belgrado era también una experiencia ecuménica significativa. El sábado el 12 de junio Patriarch Pavle, de la iglesia ortodoxa serbia, dio la bienvenida a los Secretarios Generales de una manera fraternal. En su charla y posterior diálogo se insistió en la importancia de una espiritualidad cristiana profunda para progresar en el camino de la reconciliación.
Ecumenismo
El domingo el 13 de junio los participantes fueron recibidos en el monasterio ortodoxo de Kovilj, donde el obispo Irinej de Novi Sad, les dio la bienvenida. El encuentro se caracterizó por un clima de verdadera comunión, con la celebración de Visperas, seguida de la cena.
El obispo Irinej y el arzobispo católico de Belgrado, Stanislav Hocevar, hablaron sobre los logros ecuménicos de años recientes. En 2003, por primera vez, tuvo lugar una reunión conjunta entre el Sínodo de la iglesia ortodoxa y las Conferencia Episcopales. El trabajo sobre las Comisiones y los proyectos comunes ha comenzado. Las puertas están abiertas a las dificultades y a los prejuicios que todavía persisten. Sería deseable tener un centro ecuménico para esta región de Europa, sobre todo para animar al conocimiento mutuo, al diálogo cultural y a la oración.
Los Secretarios Generales discutieron la situación ecuménica de Europa: es importante reavivar un proceso que de un nuevo impulso al camino ecuménico. Es necesaria una tercera Asamblea ecuménica europea para clarificar el espíritu y el método e instar a la participación de este acontecimiento.
Asimismo, los Secretarios Generales examinaron los proyectos dentro de la agenda del CCEE para aumentar la colaboración entre las Conferencias Episcopales. En noviembre de 2004 habrá un Simposio de los obispos africanos y europeos quienes profundizarán en sus responsabilidades pastorales que compartirán de cara a los grandes desafíos de la evangelización, de la pobreza y de la paz.
El CCEE se propone examinar de cerca su propio servicio en el campo de la cultura, de las universidades y de las escuelas. Un nuevo proyecto es el establecimiento de una Comisión para el evangelización y el diálogo que estudiará y coordinará relaciones con el judaísmo, el Islam, el budismo, otras religiones alternativas, y otras culturas. En el curso de la reunión hubo también una presentación de las iniciativas de las distintas conferencias episcopales sobre el tema de la familia.
Jornada Mundial de la Juventud
Una cita especial que aguarda la iglesia en Europa es la Jornada Mundial de la Juventud que se celebrará en Alemania en el año 2005. El secretario de la Conferencia de los obispos alemanes, Hans Langendörfer, ofreció un informe sobre los actos preparatorios y la significación del acontecimiento. Se espera que asistan más de un millón de jóvenes.
La presencia en la reunión del vicepresidente de CCEE, el cardenal de Zagreb Josip Bozanic, arzobispo de Zagreb, fue un acontecimiento significativo para la Iglesia local. La mayoría de católicos en el país es de origen croata. El cardenal Bozanic mantuvo reuniones importantes con el patriarca y otros líderes de la Iglesia ortodoxa, con las diversas comunidades de la iglesia católica y con el arzobispo católico de Belgrado, Stanislav Hocevar. El cardenal presidió una misa solemne en la iglesia de St. Anthony el domingo el 13 de junio.
Para los Secretarios Generales ha sido una oportunidad importante ver la realidad de la iglesia católica local, una iglesia que es pequeña pero valerosa, caracterizada por muchas culturas; para ver las muestras del enorme sufrimiento experimentado, como la gran cantidad de edificios destruidos en bombardeos; para percibir las dificultades que todavía arden debajo de las cenizas en lo que concierne a los diversos grupos étnicos que viven juntos y la persistencia de un falso espíritu nacionalista; y para saber a cerca de las impresionantes experiencias de reconciliación y detectar, así, la vocación de Belgrado como “ ciudad de los puentes”.
La recepción dada por la iglesia local fue extraordinaria. Los medios del país dieron mucha cobertura a la presencia del cardenal Bozanic y a esta la reunión de los Secretarios generales de las Conferencias Episcopales procedentes de los distintos países de Europa.
La reunión fue organizada por el Consejo de las Conferencias Episcopales de Europa (CCEE). Asistieron Secretarios Generales de 29 naciones: Albania, Austria, Bélgica, Bosnia-Herzegovina, Bulgaria, Bielorrusia, Croacia, Inglaterra, Francia, Alemania, Hungría, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, Rumanía, Escandinavia, Serbia y Montenegro, Escocia, Eslovaquia, Eslovenia, España, Suiza, Rusia, Ucrania (donde estaba representada la Iglesia latina y bizantina).